- 150 g de arroz de grano redondo
- 1 Bolsa de gambitas congeladas
- 2 Dientes de ajo
- 1 Huevo
- 1 Ramita de eneldo fresco
- 2 Cucharadas de queso Parmesano rallado
- 100 g de pan rallado
- 100 ml de aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Disponer las gambitas en un colador y dejar descongelar totalmente. Si es necesario, colocar bajo el agua del grifo para acelerar la descongelación.
Pelar los ajos y picarlos finamente con un cuchillo afilado. Calentar dos cucharadas de aceite de oliva en una sartén antiadherente y añadir el ajo y las gambitas descongeladas.
Sazonar con sal y pimienta y saltear durante 2 ó 3 minutos. Reservar la sartén fuera del fuego.
Lavar el eneldo bajo el chorro del agua del grifo, sexar con papel absorbente y cortar finamente con ayuda de unas tijeras de cocina.
Introducir el arroz en una olla con el doble de su volumen en agua, salar, tapar y cocer hasta que se haya absorbido toda el agua.
Verter el arroz en una fuente amplia junto con las gambitas salteadas y su jugo de coción. Mezclar bien y añadir dos cucharadas de queso Parmesano rallado y dos de eneldo picado. Volver a mezclar.
Coger un poco de arroz con una cuchara e ir formando bolitas con las manos humedecidas en agua. Pasarlas por huevo batido y rebozarlas con pan rallado. Para que queden rebozadas por todas partes, hacerlas rodar sobre el pan.
Calentar el aceite de oliva en una sartén y freír las croquetas por tandas, hasta que estén bien doradas. Dejarlas escurrir sobre papel absorbente para que suelten todo el aceite.
Colocar las croquetas en un bol y llevarlas a la mesa bien calientes.
ESTA RECETA se puede elaborar con arroz que haya sobrado de otra ocasión. Incluso con el arroz sobrante de la paella, tanto de pescado como de verduras.